El 4 de enero de 2018, el Procurador General de Estados Unidos, Jeff Sessions, promulgó un memorando en el cual delinea una nueva política del gobierno federal para la persecución judicial y castigo de la posesión, cultivo y venta de mariguana a nivel nacional. Y es que, aunque varios estados de la Unión Americana han legalizado dicha sustancia, en la legislación federal permanece como ilegal – lo que crea un conflicto entre la legislación nacional y algunas legislaciones estatales. Durante su gobierno, el Presidente Obama resolvió esta contradicción mediante una política de tolerancia ante las acciones legislativas de los estados. Sin embargo, la directiva emitida por el Procurador Sessions cancela la política del gobierno anterior, lo que adelanta controversias entre el gobierno federal y los estados con leyes permisivas sobre uso, cultivo y comercio de mariguana.